martes, 27 de octubre de 2009

Espero que la vida me lleve


La realidad por lo general es mas sútil y compleja que la simple elección entre dos posibilidades, al final ni Panama ni el taita en la selva fueron dos hojas de este diario de viaje... pero sucedieron otras cosas.
Llegamos a Quito a la casa de Fer, o mejor de Peta, un amigo de un antiguo viaje por Brasil, que nos recibio con los brazos abiertos, en un lujoso departamento con un tv de 54 pulgadas, en la que nos dedicamos a ver un poco de cine, ademas estaba parando en ese momento la Micha y Marianita dos chilenas, de las que nos hicimos amigos.
Quito es un ciudad realmente hermoso, el centro historico esta todo empedrado, con cantidad de iglesias y palacios de la epoca colonial, en fin Quito nos atrapó mas de la cuenta y nos quedamos como 10 dias, nos reencontramos con nuestros amigos viajeros Fede, Mari y Lu.
Hicimos un poquito de turismo y nos fuimos a visitar la mitad del mundo (la verdadera, calculada por gps, hay un monumento cerca mas antiguo pero que le erraron en el calculo) o sea la lina del ecuador donde suceden fenomenos extraños como la facilidad de parar un huevo en un clavo o ver como centrifuga el agua, en el sur a un metro de la linea como las agujas del reloj, y en el norte al contraio de las agujas del reloj...


Peta es un iniciado en el camino rojo, camino de chamanismo, del fuego, del San pedro, etc. después de un par de charlas, surgió la posibilidad de ir a un temascal y por supuesto aceptamos.
El temascal es como un sauna aborigen, es una carpa circular de un 1 metro de alto por 4 metros de diametro, donde uno se introduce con varias personas, formando un circulo, en el centro se van metiendo piedras (le dicen las abuelas) que durante mucho tiempo han ardido en un fuego preparado afuera, a las piedras se le hecha agua y eso genera un vapor increible, todo oscuro apenas uno ve las piedras al rojo vivo en el centro mientras se va cantando y agradeciendo a los cuatro elemnetos, la experiencia del temascal fue increible, salimos de ahi como sedados, livianos, limpios de cuerpo y alma, agradecidos al Peta y a todos los que participaron de la ceremonia.

Los dias siguieron corriendo en Quito, de paseo, de visita a amigos al hostal sucre, yendo a ver a Fede a la variete o filmando a Pablo, un personaje de mar del plata que va llevando un proyecto de Paz por los paises latinoamericanos, proponiendo armar una multinacional que compre la Paz, ya ha obtenido apoyo de mas de 67 embajadas... va vestido de blanco y para financiarse el viaje tira las cartas del tarot en la plaza...

A unos dias de irnos, Peta nos propuso ir a una ceremonia de San Pedro, y por supuesto que aceptamos, lo invitamos a Fede, y junto con Micha, Mariana, y Martin, un albanes amigo de Peta, nos fuimos todos a la ceremonia. Llegamos a lo de Tonio a eso de las 8 de la noche, era un pequeño departamento, la ceremonia es con un fuego central, asi que me pareció (desde mi prejuicio) que iba a ser medio raro tomar San Pedro en un depto, con un fuego en el living. Pero los prejuicios como nunca sirven de nada, me los saque en la ceremonia.
Puedo contar externamente lo que sucedió en la ceremonia, es muy dificil explicar lo que sucede dentro de cada uno, y al ser tan personal prefiero reservarlo.
Todo comenzo a las 10 de la noche, eramos alrededor de 20 personas, el Tonio dirigió la ceremonia de los 4 tabacos, se prende un tabaco con un fin, esta el tabaco del proposito, el del poder, el del agua y el de la mujer, se va pasando a cada uno, y uno puedo agradecer y pedir, luego del primer tabaco, se tomo San Pedro (el abuelo), y luego rondas de canto. Asi fue pasando la noche, tabaco, cantos, San Pedro, y luego de un parate apareció la abuela Ayaguasca, y comenzó otro viaje, la ceremonia terminó a las 10 de la mañana, con la madre de Tonio agradeciendo y repartiendo abundante comida a todos los presentes. 12 hs después se me habian ido todo los prejuicios, algo habia cambiado en mi y en todos, nos abrazamos y nos agradecimos, especialmente al Peta y al Tonio que durante la ceremonia siempre dió la palabra justa, como un abuelito sabio de 90 años, aunque solo tuviera 30...

Nos quedamos dos dias más en Quito y partimos a la selva porque el Peta se iba a Colombia. Visitamos Baños, luego nos quedamos en Rio Verde una semana parchando, Riobamba, Puyo, Tena, y Misahualli haciando un poco de turismo. Lo mejor que nos pasó en la selva que apenas conocimos fue conocer a Kepa, un vasco que vivia en Misahualli el cual conocimos a traves de Dani y Ursulla dos punkis chilenos que habiamos conocido en Montañita, y que nos llevaron al hospedaje del Kepa. Este vasco personaje, con mil historias de vida encima, todas las noches nos contó algun acontecimiento de su vida, que para nosotros fue como ver una pelicula, desde el intento de asesinato que le costo tener cuatro balas dentro del cuerpo hasta su ultima novia pasando por su madre presa durante 16 años por ¨terrorista de la Eta¨, le rogue que si algun día escribia su biografia sea yo quien filme su película.

Volvimos a Quito, a recoger un bolso, paramos unos dias en lo de Fede y partimos a Colombia. Luego de cruzar la frontera por Ipiales, viajamos toda la noche para Popayan. Llegamos a la mañana y agarramos el camino a San Agustin, para encontrarnos con Mari y Lucia que estaban parando en una finca. En el camino empecé a sentir que estaba en Colombia, un país que parece vivir en guerra, a mitad de camino nos pararon los militares, nos requizaron y seguimos viaje, cruzamos tanque de guerra, y mas militares, llegamos a San Agustin y fuimos derecho a la finca donde nos encontramos con Mari y Lu, y tambien con Marina y el Negro, primos e intimos amigos de las chicas que hacia 2 años que no veian, tambien ahi conocimos a Nico y Buby dos malabaristas amigos de los chicos, y Debora, amiga de las chicas.
Asi pasamos 10 dias en la finca, cocinando a leña, armando el paño para la temporada en Venezuela, jugando al jodete, conociendo el opio, je! y jugando un campeonato de ajedrez, en el cual terminé invicto... llegó a los días Fede y dejamos la finca de Agripino, el dueño con el cual habian tenido muchos problemas, y el ultimo dia se lo vio muy contento de que nos fueramos

Ahora en Bogota, intentando ver a donde nos lleva la vida...