Pasamos por la gris y humeda Lima dos dias a comprar hilos y piedras, nos hicimos amigos de 2 argentinos, Luciano y Camila, de La Plata y Rosario respectivamente, y seguimos nuestro camino hacia la cordillera blanca por el cañon del pato, una formacion rocosa donde apenas pasa el micro, y donde conte mas de 30 tuneles a traves de la montaña. Paramos unos dias en Caraz dulzura, un pueblito hermoso, donde hicimos mucha fiaca, alguna que otra caminata, y donde se empezo a gestar nuestro futuro.
Andabamos con pocas ganas de caminar en el lugar del treking!!! y habia planes de ir a la selva, asi que partimos a Huaraz. Cuando llegamos nos dimos cuenta que desde ahi era bastante complicado ir a la selva y que estabamos bastante trabados nosotros... y de repente nos iluminamos... " y si nos vamos a la playa?" "ya fue Peru, me tiene un poco cansado..." fueron los pensamientos que nos dijimos con Ceci.
En Peru si medis mas de 1,70 mts y tenes un tono de piel mas claro que el cobrizo, (ni hablar de tu acento argentino)... "sos gringo" eso implica que te pueden cobrar lo que a ellos se les ocurra y que tal vez la unica relacion que entables con alguien sea comercial (obviamente hay grandes excepciones que por suerte nos toco vivir pero en general es asi)
Si bien existe la cultura del regateo hasta para comprar un pasaje de bus, si sos gringo ( intente explicar que era hermano latino, argentino, etc) vas perdido y siempre vas a sentir que te estan sacando demas. La verdad que estabamos un poco cansados de la idiosincrasia peruana, el pais es realmente bellisimo, pero en fin... tal vez uno de los pueblos mas discriminados y golpeados de este lugar del mundo, es a su vez el mas discriminador... hasta escuche cosas como "no se preocupe en este bus no viajan peruanos.." se discriminan hasta ellos mismos y no es un problema de una clase social, sino general. Paradojas de este lugar de Latinoamerica.
Asi que partimos para la playa, bien al norte de Peru, a pasar unos dias para cruzar al Ecuador. Salteamos Trujillo, Chiclayo y Piura, las grandes ciudades del norte. Nuestra primer parada fue Lobitos. Digna escenografia de pelicula latinoamericana festivalera... un pueblo casi destruido, en ruinas, desarmado y saqueado por militares despues de la guerra con Ecuador, donde viven algunos pescadores, los galpones militares abandonados estan tomados para refugio de surfistas extranjeros, y los pelicanos son parte del paisaje costero, un lugar raro... Pasamos un dia, y seguimos nuestro camino hacia Mancora.
Mancora es un pueblo playero con turismo todo el año y joda por supuesto, no es demasiado bello pero con estar cerca del mar y poder trabajar un poco nos conformabamos. Nos alquilamos un cuartito en lo de Simona, una abuela leonina muy particular, amable y exigente, donde pasamos alrededor de 10 dias. A la mañana a desayunar a la playa y a producir, a la tarde a manguear alguna venta entre los que pasaban los dias feriado patrios en la playa y a la noche, buscar algun puesto en la feria. Todo entre birras y otras hierbas, siempre disfrutando el mar y los atardeceres del oceano pacifico. Para el cumple de Ceci, nos dimos un gustito y nos fuimos a un resto de comida tailandesa estilo palermo, donde comimos tallarin Tay pay y Arroz Chaufa, con un vino argentino que habiamos comprado exclusivamente para la ocasion. Despues a bailar musica electronica a la playa. Un noche magica!!!!
A los dias nos fuimos a vender a Punta Sal, la playa careta de Mancora. En media hora vendimos 120 soles (150 pesos arg. mas o menos) por casualidad nos volvimos a encontrar con Luciano y Camila, suspendimos la venta, y nos dedicamos a tomar cerveza hasta que no pudimos mas y nos metimos al mar, la primera vez desde que estabamos en la playa, no estaba tan fria como mardel pero tampoco era el caribe, je!.
En Mancora, conocimos mucha gente, entre ellos Fede y Vicky, una pareja de Miramar y Joel y Maria, el argentino y ella chilena, con los que nos volveriamos a cruzar en Ecuador.
Casi a punto de irnos de Peru, llegaron a Mancora Mari y Lucia, que se quedaron en lo de Simona.
Parttimos a Ecuador. Cruzamos la frontera haciando varios transbordo, entre combi, colectivo y mototaxi y encaramos para la sierra ecuatoriana. Un alivio!! la gente ecuatoriana es mas relajada, todo fluye como en otra sintonia, en fin otro pais a descubri!!!.
Nos habian recomendado mucho Vilcabamba, asi que hacia alla fuimos, hacia el valle de la longevidad. Y la verdad que valio la pena. Vilcabamba es un valle entre sierras al estilo cordoba, realmente bellisimo, rodeado de rios, entre cerros verde
s y ocres. Se dice que la gente aca vive 100 años por las propiedades del agua y debe ser cierto, porque es un lugar con una paz y una tranquilidad increibles, los dias pasan y uno no se da cuenta, entre los argentinos que estamos ya escuche a varios decir "aca los viejos se olvidan de morirse...". Hace mas de 15 dias que estoy y no me di cuenta...ja!
Alquilamos un cuarto muy lindo en la Tasca con vista al valle, y ahi nos volvimos a encontrar con Fede, Vicky, Joel y Maria. Cocinamos pizzas en horno de barro, hicimos taller de artesanias, tomamos alguna que otra cerveza y esas cosas.. con el correr de los dias nos hicimos buenos amigos. Fede y Vicky andaban con ganas de tomar San Pedro y nos dijeron a nosotros, aceptamos gustosos y junto a ellos parti como guia de la expedicion (ellos no lo conocian) en la busqueda del cactus. El San Pedro o Aguacocha, es un cactus que los aborigenes utilizaban como medicina, para la limpieza del cuerpo y principalmente para la del espiritu, el principio activo es la mescalina que se encuentra en el bord
e de adentro. Tambien contiene estricnina en su parte blanca que se utiliza como veneno y es muy peligoroso tomarla.
Despues de buscar un rato por una quebrada y de cruzarnos algunos que no nos interesaron, divisamos uno a lo alto de un acantiladito, llegamos al rato de dar una buena vuelta, y resulto que eran 2, asi que pidiendo permiso a la naturaleza, nos llevamos a los hermanitos.
Volvimos a la tasca y a los dias nos lo pusimos a cocinar. Empezamos a la 1 del mediodia con un fueguito a hervirlo y durante todo el dia fuimos intercambiando la guardia para que nunca deje de hervir. A la 1 de la madrugada, casi al borde del sueño y el cansancio total decidimos sacarlo y dejarlo preparado para el otro dia.
A la mañana siguiente, partimos con las carpas hacia un vallecito de los tantos de Vilcabamba, y despues de un rato de caminata nos instalamos en un lugar. Hicimos un lugar para el fuego, una ceremonia de agradecimiento y a las 5 de la tarde lo tomamos...
Despues de 2 horas, Fede, Vicky y Ceci ya habian vomitado, (tiene un sabor realmente espantoso). La noche se fue transformando, una noche rara y misteriosa, los cuatro ele
mentos se hicieron bien presentes, el viento rugia con amenza de tormenta, el agua corria cerca nuestro en un rio furioso que pasaba a unos metros de ahi, el fuego bailaba y nos hacia de guardian y la tierra nos dejaba acostarnos para mirar las estrellas que bailaban a su antojo ante nuestros ojos (apesar de estar todo nublado arriba nuestro siempre habia una ventana) .
Cuando uno se alejaba del fuego, y se metia en el bosque, los bichos de luz daban un espectaculo impresionante, el bosque se tranformaba en arboles de navidad gigante, cuando caminaba la tierra parecia que se despegara de mis pies, siempre que tomo aguacocha, tengo una conciencia de planeta, de vivir en una estrella, uufff dificil de explicar!!!. Se dice que el pedro es muy introspectivo, para limpiar el espiritu, cada uno de nosotros sabra lo que le paso esa noche, a los chicos le parecio que no les pego mucho, por mi parte estuvo muy bien, aunque pense que iba a ser mas fuerte.
Volvimos al otro dia, y nos encontramos con Joel y Maria que venian de una ceremonia de Aguacocha y Ayaguasca con un taita (shaman) en Saraburo, una ceremonia hermosisima donde la habian pasado muy bien y les habia servido de mucho, por lo general la medicina es mejor tomarla guiado por alguien, para sacar cosas mas en claro y aprovecharla mejor, asi que despues de que se nos termine la estadia en Vilca, asi alli partiremos, en busca del shaman...
Andabamos con pocas ganas de caminar en el lugar del treking!!! y habia planes de ir a la selva, asi que partimos a Huaraz. Cuando llegamos nos dimos cuenta que desde ahi era bastante complicado ir a la selva y que estabamos bastante trabados nosotros... y de repente nos iluminamos... " y si nos vamos a la playa?" "ya fue Peru, me tiene un poco cansado..." fueron los pensamientos que nos dijimos con Ceci.
En Peru si medis mas de 1,70 mts y tenes un tono de piel mas claro que el cobrizo, (ni hablar de tu acento argentino)... "sos gringo" eso implica que te pueden cobrar lo que a ellos se les ocurra y que tal vez la unica relacion que entables con alguien sea comercial (obviamente hay grandes excepciones que por suerte nos toco vivir pero en general es asi)
Si bien existe la cultura del regateo hasta para comprar un pasaje de bus, si sos gringo ( intente explicar que era hermano latino, argentino, etc) vas perdido y siempre vas a sentir que te estan sacando demas. La verdad que estabamos un poco cansados de la idiosincrasia peruana, el pais es realmente bellisimo, pero en fin... tal vez uno de los pueblos mas discriminados y golpeados de este lugar del mundo, es a su vez el mas discriminador... hasta escuche cosas como "no se preocupe en este bus no viajan peruanos.." se discriminan hasta ellos mismos y no es un problema de una clase social, sino general. Paradojas de este lugar de Latinoamerica.
Asi que partimos para la playa, bien al norte de Peru, a pasar unos dias para cruzar al Ecuador. Salteamos Trujillo, Chiclayo y Piura, las grandes ciudades del norte. Nuestra primer parada fue Lobitos. Digna escenografia de pelicula latinoamericana festivalera... un pueblo casi destruido, en ruinas, desarmado y saqueado por militares despues de la guerra con Ecuador, donde viven algunos pescadores, los galpones militares abandonados estan tomados para refugio de surfistas extranjeros, y los pelicanos son parte del paisaje costero, un lugar raro... Pasamos un dia, y seguimos nuestro camino hacia Mancora.
Mancora es un pueblo playero con turismo todo el año y joda por supuesto, no es demasiado bello pero con estar cerca del mar y poder trabajar un poco nos conformabamos. Nos alquilamos un cuartito en lo de Simona, una abuela leonina muy particular, amable y exigente, donde pasamos alrededor de 10 dias. A la mañana a desayunar a la playa y a producir, a la tarde a manguear alguna venta entre los que pasaban los dias feriado patrios en la playa y a la noche, buscar algun puesto en la feria. Todo entre birras y otras hierbas, siempre disfrutando el mar y los atardeceres del oceano pacifico. Para el cumple de Ceci, nos dimos un gustito y nos fuimos a un resto de comida tailandesa estilo palermo, donde comimos tallarin Tay pay y Arroz Chaufa, con un vino argentino que habiamos comprado exclusivamente para la ocasion. Despues a bailar musica electronica a la playa. Un noche magica!!!!
A los dias nos fuimos a vender a Punta Sal, la playa careta de Mancora. En media hora vendimos 120 soles (150 pesos arg. mas o menos) por casualidad nos volvimos a encontrar con Luciano y Camila, suspendimos la venta, y nos dedicamos a tomar cerveza hasta que no pudimos mas y nos metimos al mar, la primera vez desde que estabamos en la playa, no estaba tan fria como mardel pero tampoco era el caribe, je!.
En Mancora, conocimos mucha gente, entre ellos Fede y Vicky, una pareja de Miramar y Joel y Maria, el argentino y ella chilena, con los que nos volveriamos a cruzar en Ecuador.
Casi a punto de irnos de Peru, llegaron a Mancora Mari y Lucia, que se quedaron en lo de Simona.
Parttimos a Ecuador. Cruzamos la frontera haciando varios transbordo, entre combi, colectivo y mototaxi y encaramos para la sierra ecuatoriana. Un alivio!! la gente ecuatoriana es mas relajada, todo fluye como en otra sintonia, en fin otro pais a descubri!!!.
Nos habian recomendado mucho Vilcabamba, asi que hacia alla fuimos, hacia el valle de la longevidad. Y la verdad que valio la pena. Vilcabamba es un valle entre sierras al estilo cordoba, realmente bellisimo, rodeado de rios, entre cerros verde
s y ocres. Se dice que la gente aca vive 100 años por las propiedades del agua y debe ser cierto, porque es un lugar con una paz y una tranquilidad increibles, los dias pasan y uno no se da cuenta, entre los argentinos que estamos ya escuche a varios decir "aca los viejos se olvidan de morirse...". Hace mas de 15 dias que estoy y no me di cuenta...ja! Alquilamos un cuarto muy lindo en la Tasca con vista al valle, y ahi nos volvimos a encontrar con Fede, Vicky, Joel y Maria. Cocinamos pizzas en horno de barro, hicimos taller de artesanias, tomamos alguna que otra cerveza y esas cosas.. con el correr de los dias nos hicimos buenos amigos. Fede y Vicky andaban con ganas de tomar San Pedro y nos dijeron a nosotros, aceptamos gustosos y junto a ellos parti como guia de la expedicion (ellos no lo conocian) en la busqueda del cactus. El San Pedro o Aguacocha, es un cactus que los aborigenes utilizaban como medicina, para la limpieza del cuerpo y principalmente para la del espiritu, el principio activo es la mescalina que se encuentra en el bord
e de adentro. Tambien contiene estricnina en su parte blanca que se utiliza como veneno y es muy peligoroso tomarla.Despues de buscar un rato por una quebrada y de cruzarnos algunos que no nos interesaron, divisamos uno a lo alto de un acantiladito, llegamos al rato de dar una buena vuelta, y resulto que eran 2, asi que pidiendo permiso a la naturaleza, nos llevamos a los hermanitos.
Volvimos a la tasca y a los dias nos lo pusimos a cocinar. Empezamos a la 1 del mediodia con un fueguito a hervirlo y durante todo el dia fuimos intercambiando la guardia para que nunca deje de hervir. A la 1 de la madrugada, casi al borde del sueño y el cansancio total decidimos sacarlo y dejarlo preparado para el otro dia.
A la mañana siguiente, partimos con las carpas hacia un vallecito de los tantos de Vilcabamba, y despues de un rato de caminata nos instalamos en un lugar. Hicimos un lugar para el fuego, una ceremonia de agradecimiento y a las 5 de la tarde lo tomamos...
Despues de 2 horas, Fede, Vicky y Ceci ya habian vomitado, (tiene un sabor realmente espantoso). La noche se fue transformando, una noche rara y misteriosa, los cuatro ele
mentos se hicieron bien presentes, el viento rugia con amenza de tormenta, el agua corria cerca nuestro en un rio furioso que pasaba a unos metros de ahi, el fuego bailaba y nos hacia de guardian y la tierra nos dejaba acostarnos para mirar las estrellas que bailaban a su antojo ante nuestros ojos (apesar de estar todo nublado arriba nuestro siempre habia una ventana) .Cuando uno se alejaba del fuego, y se metia en el bosque, los bichos de luz daban un espectaculo impresionante, el bosque se tranformaba en arboles de navidad gigante, cuando caminaba la tierra parecia que se despegara de mis pies, siempre que tomo aguacocha, tengo una conciencia de planeta, de vivir en una estrella, uufff dificil de explicar!!!. Se dice que el pedro es muy introspectivo, para limpiar el espiritu, cada uno de nosotros sabra lo que le paso esa noche, a los chicos le parecio que no les pego mucho, por mi parte estuvo muy bien, aunque pense que iba a ser mas fuerte.
Volvimos al otro dia, y nos encontramos con Joel y Maria que venian de una ceremonia de Aguacocha y Ayaguasca con un taita (shaman) en Saraburo, una ceremonia hermosisima donde la habian pasado muy bien y les habia servido de mucho, por lo general la medicina es mejor tomarla guiado por alguien, para sacar cosas mas en claro y aprovecharla mejor, asi que despues de que se nos termine la estadia en Vilca, asi alli partiremos, en busca del shaman...
