viernes, 5 de marzo de 2010

No voy en tren voy en avion


Volvimos muy ansiosos de la Gran Sabana, y decidimos ir a pasar los carnavales a Bahia de Cata, un lugar paradisíaco, palmeras, arena y mar. Instalamos nuestra carpita bajo un arbol, hicimos una cocina rudimentaria y ahi nos quedamos unos dias en la soledad del paraiso... Al pocos tiempo apareció Naty, una amiga de chichiriviche, que instaló su carpa cerca de la nuestra, empezamos de a poco a armar la comunidad. Con el tiempo llegaron mas artesanos a nuestro paraje porque se acercaban los carnavales.
En un momento la cosa estalló, la playa se minó de carpas una al lado de la otra, por donde se caminará habia carpas, gente y carpas y más gente, algo que no habiamos visto nunca en otros países, que te dejen acampar en cualquier lado. "Y si" me dijo un venezolano "aca la playa es pública, porque no te van a dejar dormir aca?" "en mi pais no pasa, pones una carpa en mardel y te raja la policia" le contesté y me miró asombrado.
Con la ola de gente que cayó, aprobechamos la movida y salimos a vender, a juntar las últimas monedas para los últimos días en Venezuela. También por esos días aparecieron Dolly y Daro los uruguayos amigos de chichiriviche, muy conmocionados por su pronta vuelta al Uruguay.
Después que pasó el carnaval de 4 intensos días de vender y tejer, pudimos "respirar" tranquilos y volver a lo que habia sido el paraiso. Eso sí, como no habia baños por esas playas, se hacian las necesidades donde fuera, cuando se fueron todos, habia más olor a mugre y basura que en el camino del Buen Ayre, realmente insolito!!
Con la platica que nos quedaba nos fuimos con Naty a Merida, a pasar la última semana en Venezuela, antes del ansiado retorno a casa. Hace dos meses que sabiamos que en marzo volviamos a visitar a la familia y a conocer a nuestro ahijado Pedrito, habiamos comprado pasajes baratisimos y la ansiedad por ver a todos los seres queridos nos estaba comiendo... Por suerte en Merida, nos encontramos con Fede, Javi, Franco y un monton de gente más, y pasamos una semanita super relajada, tejiendo, saliendo a tomar algo, charlando, en fin divertiendonos pero siempre pensando en como seria el retorno a Argentina...

Todo salió como lo esperabamos, tuve mi primera experiencia de volar en avión, y volvimos por un tiempito a nuestra tierra, mi hermana nos esperaba en ezeiza, era la única que sabía que volviamos de las familias, caimos de sorpresa..."un año y medio en llegar a Venezuela y volvemos en 10 horas" pensé... ¿adoro la teletransportación?